Motivación
Compartir:

Miedos del opositor

El proceso de opositar se parece bastante al que siguen los deportistas de élite, ante olimpiadas, campeonatos o competiciones. En ambos casos, se trabaja muy duro durante meses, o normalmente años, para conseguir un resultado excelente un día concreto. Te esfuerzas durante muchas semanas para que tu nivel de preparación sea el mejor posible, luchas cada día por mejorar y tu vida se convierte en un afán de superación constante para conseguir eso que tanto deseas.

Y a pesar de tener claros tus objetivos, de trabajar duro y de esforzarte al máximo, hasta los mejores deportistas del mundo flaquean y se ven invadidos por pensamientos negativos anticipatorios, igual que tú. Hasta ellos tienen miedo antes de la prueba. Miedo a fallar. Igual que tú. Todo eso que piensas alguna vez, es normal. Tener miedo mientras opositas es normal. Miedo a bloquearte, a quedarte en blanco y a fallar justo ese día. A suspender y decepcionar a todos aquellos que confían en ti. A perder los mejores años de tu vida delante de apuntes para después no aprobar. A que los nervios te invadan y no puedas hacer nada. A no manejar la presión. A olvidarte de todo. Miedo a hacer el ridículo delante del Tribunal. A ponerte enferma esos días y no rendir. A perder otro año más sin garantías reales de que el próximo sea el definitivo. Miedo a que nuestra gente nos deje de entender. A que nos dejen de llamar para hacer planes. A perder amigos o parejas por el camino. Miedo a no llegar a conseguirlo nunca. A no ser capaz. A no ser tan lista como los demás. A no llegar al nivel. Miedo a tantas cosas…

Tener miedo es normal.

Pero aún así, no queremos vivir con miedo y mucho menos, estudiar con esos miedos anticipatorios. Si observas atentamente, suelen ser fruto del agotamiento y es probable que te invadan los días de más cansancio. La fatiga hace flojear nuestra fortaleza mental.

Así que, Regla número 1: descansa y “mañana será otro día”.

Regla número 2: Recuerda que lo importante es mejorar tu nivel, que opositar es un camino, que termina el día que consigues tu meta y que, si avanzas, aunque sea poco, te estás acercando a ella. El resultado depende de muchas variables, pero que tu nivel mejore cada mes depende de ti.

Y Regla número 3: Repítete mentalmente tus mantras motivadores: eres capaz, si otros lo han hecho, tú también lo harás, es cuestión de tiempo: antes o después, lo conseguirás. Así, nos deshacemos cuanto antes de esos miedos anticipatorios que no aportan nada y sólo te hacen perder el foco y la concentración.

Compartir:

Regístrate para recibir novedades, mi newsletter y todas las ofertas

Oposiciones para psicólogos

Oposiciones para psicólogos

En este artículo te brindamos una visión detallada de las distintas oposiciones para psicólogos en España, abarcando áreas como las instituciones penitenciarias, el sistema PIR, y roles en orientación laboral y educativa, así como en la policía y el ejército.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *