Todo programa de oposición está compuesto, en un porcentaje mayor o menor, de materia legislativa. Por ello es fundamental aprender a memorizar leyes para oposiciones.
Mi opinión es la siguiente: cuantos más temas sean leyes, mejor. ¿Por qué?
Porque el contenido completo y exacto que tienes que dominar y que te pueden preguntar lo tienes disponible, sólo tienes que memorizarlo.
Y ahí viene la parte más compleja, pero no imposible.
Errores al memorizar leyes para oposiciones
Error número uno que te hará perder tiempo y posiblemente frustrarte: intentar memorizar el contenido de la ley en la primera vuelta.
La primera lectura es de subrayado, comprensión de tres o cuatro ideas y hacer un esquema básico de la estructura de la ley.
Olvídate de datos concretos, artículos y palabras o expresiones que quizás no comprendes todavía.
La comprensión y memorización de materia legislativa es de menor grado de complejidad y detalle, a más, y esto, se consigue con muchas vueltas.
Error número dos, estudiar leyes únicamente por el material de la academia o del preparador.
Te diría, que es casi obligatorio, imprimir cada ley de tu programa en formato BOE.
Recordad al buscar, que debéis elegir la pestaña del BOE «Texto Consolidado», porque puede haber artículos derogados o modificados.
Así, los apuntes son un guion, pero también estudiamos la propia ley. Es más sencillo comprenderlas cuando las lees de principio a fin, que por partes y mezcladas con otro contenido.
No tengáis miedo a añadir más contenido con este método, porque es el mismo contenido, pero en un formato diferente que ayuda al cerebro a que, de una manera u otra lo memorice.
Después de esa primera vuelta, debes hacer otra más profunda.
Pero de nuevo, asumiendo que no serás capaz de memorizar todo en la segunda vuelta. Y será a partir de la tercera y sucesivas cuando podrás hacer esquemas más complejos, tablas con contenido específico, esquemas más comprensivos, etc.
Acostúmbrate a generar tu propio material. De nuevo, ayudamos la memorización, al reiterar el mismo contenido, en diferente formato.
Y por último, haz «micro arrastres». Una vez has dado varias vueltas, ve anotando en una libreta pequeña, con esquemas, buena letra y simplificado, lo que más te cuesta memorizar o el contenido más complejo esquematizado.
Repásalo al final del día, con poco esfuerzo, simplemente leer.
Así aseguras 30 repasos selectivos al mes, que multiplicado por diez meses son 300 repasos. Ojo, debes ser selectivo, porque si tienes mucho contenido en esta libreta, gastarás demasiado tiempo en repasarla a final del día.
Te aseguro, que al cabo de un año de estudiar así, te lo sabes todo con mucha precisión.
Es la materia más objetiva de tu examen. Asegúrate de dominarla, para que tu nota final sea lo más alta posible.